El mundo está lleno de desafíos. En esa insoportable levedad del ser que casi siempre es la vida, no hay nada más real en ella que cuando miras a los ojos a los problemas de verdad. Ahí es cuando dejamos de vivir en una serie ñoña de Netflix, con las que llenamos tiempo insustancial, para retratarnos ante nuestra fragilidad y la de aquellos que nos rodean. Por eso, nuestra compañía trata de estar, hasta dónde sus límites lo permiten, con aquellas causas que nos hacen más humanos, menos egoístas y superficiales.
Nos hemos sumado como socio corporativo a la Fundación Cris contra el Cáncer para ayudar a que esta entidad siga con su enorme labor en el fomento y desarrollo de la investigación para luchar contra el cáncer.